Bruselas es la principal puerta de entrada a Bélgica. La ciudad del Manneken Pis, está repleta de unos cuantos museos impresionantes; Es un destino para disfrutar de un delicioso chocolate en el centro de una ciudad dividida en dos partes: La zona alta y la ciudad baja, con una hermosa catedral y una famosa plaza, donde podrás disfrutar sentado en alguna de sus terrazas tomando cerveza belga. Como verás, este destino te va a encantar.
Al recorrer esta ciudad puedes admirar diferentes estilos arquitectónicos, con construcciones medievales y modernas, especialmente en el centro en donde están algunos de los sitios más importantes como Grand Place. Uno de los símbolos de Bruselas es Manneken Pis, la estatua de bronce de un niño pequeño orinando dentro de la fuente. La estatua fue creada por el escultor barroco franco-flamenco Jérôme Duquesnoy.